Si bien es al principio de la primavera uno de los mejores momentos para trasplantar árboles y arbustos, con suficientes cuidados y precauciones también puede hacerse en otros momentos del año.
Como recomendación general, hay que tratar de evitar hacerlo en pleno rebrote vigoroso de la planta pues se considera que sufrirá el “impacto” mucho más en esta etapa en relación a otras.
¿En qué medida es un impacto?
Trasplantar, es como hacer una cirugía en una persona mientras está despierta. Como momento inmejorable se recomienda el período de latencia que se inicia en el otoño y se extiende hasta los primeros “calores” de fines de primavera.
Consejos y precauciones para trasplantar
- Hay un sólo período en que se señala un “no” rotundo: es una vez que la hoja se desarrolla y luce en su esplendor; en ese caso se deberá esperar hasta el otoño.
- Cuando trasplantar signifique sacar los arbustos a raíz desnuda, sólo asegúrate de que las raíces estén fuera de la la tierra el menor tiempo posible, y en el peor de los casos hay que mantener las raíces húmedas, mientras ello suceda.
- Asegúrate de que no queden bolsas de aire alrededor de las raíces cuando replantes.
- No tengas miedo de cortar algunas raíces cuando trasplantes. Solo trata de no cortar más corto que las pautas anteriores que veas. Cortar las raíces bien, realmente ayudará a revitalizar la planta. Es un proceso conocido simplemente como la poda de raíces. Cuando se cortan las raíces, la planta se desarrolla raíces laterales para compensar lo que se pierde. Estas raíces laterales son más fibrosas en su naturaleza, y tienen más capacidad para absorber agua y nutrientes.
Ahora sí, ya estás en condiciones de realizar los trasplantes que consideres necesarios para embellecer tu jardín tanto como lo deseas. Una vez que lo logres, si me aceptas un buen consejo, toma una cámara y captura el momento. Fotos o vídeos, como prefieras, pero registra esa obra de arte tan especial que has logrado concretar poniendo en juego tu energía y tu creatividad.
